Eso que nombrarón autonomía triqui, Timo...Armando Martínez
Timoteo Alejandro Ramírez y eso que nombraron la autonomía triqui
A dos años del asesinato aún impune de Timoteo Ramírez,
líder natural de los triquis y constructor del proceso autonómico de esta
adolorida región, se presenta este relato que habla de una vida de congruencia y
consecuencia.
El
recuerdo de sus palabras y sus obras se encuentra vigente, vivo entre quienes lo
conocieron de cerca, entre quienes lo vieron crecer en su comunidad natal de
Naj’a (Yosoyuxi), Copala, Oaxaca: “Organizados podemos hacer muchas
cosas, sin la intervención del gobierno, ni de los partidos políticos. Si
nuestros abuelos, hace muchos años, cuando no había carreteras ni escuelas,
podían vivir y hacer crecer la comunidad, ¿por qué no lo podemos hacer ahora?”.
Ese era el profundo pensamiento de Timoteo Alejandro, a quien cariñosamente
recuerdan como don Timo, uno de los líderes triquis más importantes de la
historia de este pueblo indígena, según testimonios de desplazados y desplazadas
del Municipio Autónomo de San Juan Copala (MASJC).
Los sobrevivientes a la violencia estatal y paramilitar
de la región triqui narran como el liderazgo de don Timoteo surgió a muy
temprana edad, cuando entró al albergue escolar de Yosoyuxi y empezó a notar
algunas reglas injustas en la organización propuesta por los profesores
encargados de la administración del lugar. “Habrá tenido entre siete u ocho años
cuando empezó a organizar a sus compañeros para cambiar esas reglas, porque los
maestros mandaban a los niños chiquitos a traer leña y los paraban muy temprano.
A las niñas también las paraban muy temprano para que llevaran el nixtamal al
molino y pues muchas veces se caían o tiraban el nixtamal porque estaba muy
oscuro todavía. Él no estaba de acuerdo en que mandaran a los más chiquitos,
entonces organizó a los chavos mas grandecitos y a las chavas más grandecitas,
para que fueran a hacer esas actividades, porque a los más niños no había que
tratarlos así”. Por aquellos años la escuela primaria de Yosoyuxi sólo
ofrecía estudios hasta el tercer grado, y por tal motivo, don Timo terminó su
primaria en la escuela “Renovación” de San Juan Copala.
Posteriormente se casó y regresó a vivir a su pueblo,
donde comenzó a vislumbrarse su capacidad de organización comunitaria. Ya casado
fue encargado del patronato del albergue de Yosoyuxi y empezó a trabajar en
conjunto con los niños, los profesores y las familias triquis de su comunidad.
Todos reconocían su trabajo y lo respetaban: niños, adultos y viejitos. Su
compromiso y carisma lo llevaron inmediatamente a asumir el cargo de Agente
Municipal. Fue así, trabajando y organizando a los suyos, como se ganó el
respeto y el título de líder moral y poco a poco lo fueron reconociendo en otras
comunidades de la Triqui Baja. Uno de sus principales logros políticos, al lado
de otros líderes reconocidos como el profesor Paulino Martínez Delia (+) y Don
Enrique Acevedo, fue la creación del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui
(MULT) en 1981.
Don Timo vivió en carne propia la represión. Siendo
niño quedó huérfano de padre cuando lo asesinaron los caciques priistas que
operaban en Juxtlahuaca, Tlaxiaco y Putla. Este acontecimiento, reflexionan sus
compañeros de lucha, tal vez le permitió forjar su carácter y madurar
tempranamente, así como enfrentar las injusticias. Uno de los momentos más
difíciles de su vida fue la pérdida de su hijo en una emboscada en el camino a
Guadalupe Tilapa, cuando viajaba en un coche luego de que acababa de regresar de
Estados Unidos. Lo que más lo entristeció fue que las balas que asesinaron a su
hijo en realidad querían apagar la voz disidente del propio Timoteo. Este
incidente lo obligó a hacer público su deslinde del MULT-PUP. A pesar de ello,
Don Timo siempre fue muy positivo, daba ideas y nunca buscó la venganza, al
contrario, decía que tenía que perdonar, de lo contrario, el baño de sangre
entre hermanos triquis nunca acabaría.
En
alguna ocasión, don Timoteo Alejandro nos comentó que nunca pensó en ser líder.
Desde muy joven, recordó, acudía a las asambleas sin tomar la palabra, sino
apropiándose de la palabra de los mayores y todo lo que aprendió fue gracias a
la disposición de acompañar, escuchar y respetar a los fundadores del MULT.
También platicó como los líderes políticos de Juxtlahuaca, que miraban su
temprano liderazgo, no escatimaron en ofrecerle dinero o puestos políticos:
“un día llegó el presidente de Juxtlahuaca a mi casa, le ofrecí un
refresco y me dijo- está muy pobre tu casa y tu tienda se ve muy vacía, ¿a poco
no te gustaría una casa de dos pisos y tener una tienda bien surtida? Yo te
puedo ayudar si te unes conmigo-. Esto fue durante unas elecciones estatales. Le
contesté,-pero ‘mano’, ¿cómo quieres que haga eso? Yo no soy solo, que va pasar
con la tranquilidad de mi pueblo, yo no puedo traicionarlos, yo no quiero
eso-.”
Sobre el proceso de autonomía en la región, sumando a
las comunidades de Yosoyuxi, Paraje Pérez, San Juan Copala, Agua Fría, Santa
Cruz Tilapa y Guadalupe Tilapa para conformar el MASJC, Timoteo Alejandro no fue
quien propuso textualmente la autonomía, pero en los hechos siempre trabajó por
construir la organización y unión comunitaria de los barrios triquis a partir de
la recuperación de los conocimientos heredados de los anachi’a y
atachi’a (ancianos y ancianas de las comunidades):“A él nadie le dijo
como hacer lo de la autonomía, él proponía que se debía trabajar como lo hacían
los abuelitos anteriormente y reflexionaba cómo nuestros abuelitos sin saber
leer y sin estudios podían vivir bien sembrando por ellos mismos su maíz,
comiendo quelites, haciendo trabajo comunitario, asumiendo cargos y respetando
las asambleas. Todo lo hacían por ellos mismos y para su pueblo. Esa era su
idea, que nosotros mismos podemos trabajar para nosotros mismos y construir
muchas cosas. Nadie nos debe pagar para hacer el bien por nuestra comunidad.
Fueron los más jóvenes, o los que tenían más estudio que le nombraron a eso:
autonomía.”
El
tiempo y los hechos han puesto en su justa dimensión la visión que tuvo Timoteo
Alejandro para agrupar a las comunidades triquis en el MULT-Independiente, pues,
como denuncian los desplazados del MASJC, actualmente Rufino Merino Zaragoza,
utiliza nuevamente su posición frente al MULT para ser candidato plurinominal a
diputado federal por el partido Movimiento Ciudadano, que forma parte del
Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).
El
20 de mayo de 2010, unos supuestos proveedores de mercancías llegaron a la
puerta de su tienda y lo asesinaron junto con su esposa, a sangre fría frente a
sus hijos e hijas. Nadie entre los triquis cree la versión oficial que inventó
una supuesta afrenta personal como móvil de su asesinato que sigue, después de
dos años, impune. Quienes estuvieron detrás del meticuloso asesinato, sabían
quién fue don Timo: “Él era muy diferente a todos. En el pueblo la mayoría son
machistas y no quieren la opinión de las mujeres, no quieren que participen…En
cambió él no, a él le interesa que participen hombres, mujeres, viejitos y
niños, para él todos somos iguales y todos valemos. Él no resolvía los problemas
imponiendo multas sino hablando con las familias.”
El
dolor es grande, coinciden mujeres y hombres, jóvenes y ancianos triquis. La
mayoría de los testimonios hablan de don Timoteo Alejandro Ramírez como un gran
hombre que tuvo amigos en todas las comunidades de la Región Triqui Baja. El
pensamiento de él no morirá mientras sigan luchando por los ideales que Timo
tenía, por eso que otros han nombrado la autonomía Triqui.
No hay comentarios:
Publicar un comentario